Dormir bien es la clave para la salud y el bienestar de un recién nacido, por lo que es importante proporcionarle todas las condiciones necesarias. Además de una cuna acogedora y un ambiente relajado, es importante proporcionar ropa de dormir cómoda: pijama.
Debe recordarse que al elegir la ropa, no se debe guiar por la apariencia, sino por su conveniencia y practicidad, tanto para el niño como para la madre.
Modelos
Hay varios tipos de pijamas para recién nacidos, que difieren en corte, tela, sujetadores, color y otros aspectos.
Los modelos populares incluyen:
- Sobres o sacos de dormir. Pueden ser con o sin mangas, pero la característica principal es que la parte inferior está hecha en forma de bolsa, no de pierna.
- Resbalones o monos. Tales pijamas son los más populares, por lo que son cómodos y cálidos. Los resbalones pueden ser con mangas y piernas cerradas o abiertas.
- Cuerpo. Este modelo de ropa para dormir, de hecho, es el mismo slip, pero con piernas y mangas acortadas. Las opciones de verano no tienen mangas y piernas en absoluto.
Los pijamas para recién nacidos pueden equiparse con diferentes cierres: botones, botones y una cremallera.
Se cree que la opción más conveniente son los modelos con botones, como no interfieren con el bebé y se abrochan fácilmente. Pero también debe tenerse en cuenta que los pijamas con cremalleras también son bastante prácticos. Pero al comprar, es importante prestar atención al hecho de que el sujetador debe estar oculto desde el interior.
Los sujetadores de la ropa para dormir se pueden ubicar de la siguiente manera:
- en la parte posterior del producto;
- cerca del cuello;
- desde el cuello hasta la ingle;
- desde el cuello hasta el pie de una pierna;
- desde el cuello hasta los pies de ambas piernas;
- de una pierna a otra
Los pijamas con capucha son bastante comunes en venta, pero debe entenderse que tales modelos pueden ser extremadamente incómodos, especialmente para niños activos.
Consejos de selección
Muchas madres compran pijamas, solo mirando su apariencia, y no piensan en absoluto si el niño se sentirá cómodo durmiendo con esa ropa. Para elegir algo bueno y conveniente, debe prestar atención a lo siguiente:
1. Material. Debe ser natural para no causar reacciones alérgicas. Para los meses más cálidos, es mejor elegir productos de satén o algodón, y para el invierno, el vellón, la franela y la bicicleta son adecuados.
2. El modelo. Los pijamas deben ser simples, sin una decoración voluminosa, bolsillos y otros elementos groseros. En la temporada de frío, es mejor dar preferencia a la ropa con las piernas y las mangas cerradas, y para el verano debe comprar modelos más abiertos.
3. Cierres. Tanto para el niño como para la madre, la opción más conveniente serían los botones. En los resbalones, deben ubicarse a lo largo de todo el pijama y en el cuerpo, en el cuello y en las piernas, o en el área de la ingle.
4. Tamaño. Durante el sueño, nada debe interferir con el niño y obstaculizar sus movimientos, por lo que se recomienda elegir ropa gratis, aproximadamente 1 talla más grande.
5. El modelo. Este criterio dependerá de la edad del bebé, su actividad y las preferencias de los padres. Además, cada madre sabe con qué ropa se siente más cómoda su hijo.
Las imagenes
Los slip con pies cerrados y manga larga son perfectos para la temporada de frío. Son cómodos de usar debido a la presencia de botones en las piernas y cerca del cuello. La ausencia de una capucha permitirá que el bebé mire libremente a su alrededor.
Un amplio deslizador de pijama para un recién nacido permitirá al bebé tomar cualquier postura durante el sueño. Los puños elásticos en las mangas y las perneras del pantalón no permitirán que la ropa se abulte y, por lo tanto, expongan los brazos y las piernas.
Los suaves pijamas de invierno en forma de oso de peluche no permitirán que el bebé se congele incluso en las noches más frías. Gracias a la cremallera, el mono se desabrocha y se abrocha fácilmente. Si es necesario, los tiradores se pueden abrir, como Se proporcionan válvulas especiales en los manguitos.