Los gatos y los perros juegan un papel importante en la vida humana. Compiten entre ellos en cuál de ellos es el mejor amigo de una persona. Los perros de algunas razas sirven al beneficio de la humanidad, salvando la vida de personas que se ahogan o buscando sustancias narcóticas. Los gatos, a su vez, tienen intuición, sienten el estado de ánimo del dueño y, en casos raros, incluso pueden curar la depresión.
A pesar de las grandes diferencias, los perros y los gatos tienen una serie de características comunes: amor por una persona, una dieta similar, la presencia de abundante lana. Sin embargo, la pregunta "¿Quién es más inteligente: gatos o perros?" interesa a muchas personas, por lo que nuestro artículo lo responderá en detalle.
Comparación de inteligencia
Los científicos han realizado una serie de estudios sobre inteligencia animal, durante los cuales se llegó a la siguiente conclusión: El cerebro del perro contiene más de 525 millones de neuronas, mientras que en el gato esta cifra es de 250 millones. Esto da una respuesta clara a la pregunta desde el punto de vista de los hechos científicos. También se descubrió que el cerebro del mapache es igual en número a las neuronas caninas, por lo que los mapaches pueden pensar junto con estas mascotas de cuatro patas.
Los perros también se comparan favorablemente con los gatos en que pueden aprender de sus parientes. El perro lo acumula, asimila las habilidades de supervivencia y, en el proceso de reproducción, transfiere genes a su descendencia. Los gatos no son propensos a tal herencia, y los gatitos nacen sin el conocimiento de sus padres.
Por supuesto, algunos conocimientos siempre se heredarán en la familia de los gatos, pero la evolución de los perros en este asunto es más progresiva.
La conclusión de que los perros son dos veces más inteligentes que los gatos se puede interpretar desde diferentes puntos de vista. Algunos científicos están de acuerdo en que los gatos son simplemente menos susceptibles de estudio y análisis, por lo que es demasiado pronto para sacar conclusiones sobre la racionalidad de las mascotas. Se sabe que los gatos a menudo llevan un estilo de vida diferente y son caprichosos. Al mismo tiempo, el perro convive mejor en un equipo de parientes y puede aprender de otros perros, aprendiendo de los errores de otras personas.
Características animales
Para obtener una imagen completa de las capacidades intelectuales de los gatos y los perros, es necesario hacer una serie de signos para cada especie: cómo los gatos difieren de los perros para mejor y viceversa. Los gatos difieren de los perros en las siguientes formas.
- Manipulación por el hombre. Dejando de lado el humor, podemos decir con confianza que los gatos tienen la capacidad de manipular al dueño. Esto sucede porque los gatos entienden intuitivamente a qué acciones reacciona el propietario de manera particularmente aguda. ¿Todos recuerdan al famoso gato rojo con botas, que miró con los ojos de los héroes de la caricatura "Shrek"? Este es un vívido ejemplo de la manipulación de mascotas más simple.
El hecho habla de la inteligencia altamente desarrollada de los gatos y la capacidad de analizar el comportamiento de las personas que lo rodean, aplicando este conocimiento para su propio beneficio.
- Priorización. El dueño del gato a menudo observa la siguiente imagen: el gato pasa intencionalmente por un juguete nuevo y prefiere otra ocupación, pero en un mes puede interesarse repentinamente en este tema. Esto confirma una vez más que los gatos pueden centrarse específicamente en aquellas cosas que interesan a la mascota en un período de tiempo determinado. Tal legibilidad en los pasatiempos afirma que los gatos son criaturas con un carácter individual, a veces de mal humor.
- La frialdad o la calma de hierro de los gatos.. Los gatos soportan a nuevos conocidos con bastante fuerza, y cada nuevo sujeto en su hábitat se somete a un estudio pausado y cuidadoso. Si el perro no puede contener la curiosidad y se apresura hacia un objeto no identificado (pelota, juguete), entonces cualquier gato es cauteloso de explorar el objeto: olfatear, caminar y mirar de cerca. Este enfoque ha ayudado repetidamente a los gatos a evitar problemas ambientales.
Los perros también tienen algunas características que distinguen sus habilidades intelectuales de los felinos.
- Dominar nuevas habilidades. Los perros se sienten mucho más cómodos con el entrenamiento en equipo, mientras que los gatos pierden rápidamente interés en el entrenamiento. El perro está tratando de complacer al dueño y obtener la aprobación. Esto define dos cualidades en los perros: lealtad y memorización rápida de la información.
- Movimientos torpes. El perro no se esfuerza por un movimiento elegante o silencioso: es más probable que el animal corra hacia el objetivo en lugar de moverse con gracia. Los representantes de la familia de los gatos luchan por un movimiento suave y silencioso.
- Pobre tolerancia a la soledad. Un gato puede estar sin presencia humana durante un día sin experimentar molestias. El perro se preocupará por dónde desapareció el dueño y por qué no hay nadie en la habitación. Esto no significa que los perros sean más inteligentes que los gatos, pero los caracteriza como criaturas comunicativas y amigables.
- Mente colectiva. Los perros usan en el proceso de caza de presas a todos los parientes: se combinan en una bandada, y cada individuo tiene una tarea clara. No hay tales ejemplos entre los representantes felinos, porque los gatos prefieren perseguirlos solos.
El efecto de la domesticación.
Durante mucho tiempo, los investigadores difundieron la teoría de que La domesticación de las mascotas llevó a un deterioro de su inteligencia y actividad cerebral. Supuestamente, debido a las moderadas condiciones de vida (cama blanda, alimentación diaria, acariciar al dueño), los gatos y los perros han perdido parte de su mente. La teoría sugirió que los animales ya no tenían que buscar constantemente comida, durante la noche, y un lugar seguro para dormir y descansar.
Sin embargo, después de una investigación seria, el hecho de la pérdida de habilidades intelectuales en las mascotas fue refutado.
Aunque las mascotas ya no necesitan habilidades de supervivencia en el entorno actual, usan la capacidad de pensar para otros fines: explorando el mundo, recordando equipos y complaciendo a tu propio maestro.
El siguiente video se centrará en la inteligencia animal con más detalle.